Aplaudo.
Fue en el programa Bicentenario de hoy, 27 de abril. Sí, el que conducen Jorge Halperin, Nora Anchart, Santiago Varela y Ana Padovani.
El que está de lunes a viernes, de 14 a 15 horas por Radio Nacional AM 870
¡Gracias, Daniel de Pacheco!)
Es el espacio de los oyentes de radio que se encontraron en la esquina de El Molino, el viernes 9 de octubre de 2009
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Gente: sugiero escuchen y promuevan la sección llamada "No caigas en
cuentos de hadas" del programa de Aliverti. El tema de la trata de
blancas es serio y me gustaría crear conciencia entre los usuarios (que
son muchísimos).
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UNA SOLA GOTA DE SANGRE
no ha de saltar el odio, como llama de azufre,
/de mi herida”.
es necesaria
para saber qué destino de sangre
tuvo esa sangre.
De qué espacio prohibido
fue arrancada.
Pero ellos están presos
en la casita de caramelo
y no pueden salir
a la vida.
Ellos no quieren saber.
Otros quieren saber.
Desesperadamente quieren saber.
Ellos están presos.
Una sola gota de sangre
es necesaria
para saber qué destino de sangre
tiene esa sangre.
Para saber qué gritos fueron silenciados.
De qué horror fueron arrancados.
De qué pozo abominable, de qué manos agobiadas,
de qué infinito espanto fueron arrebatados.
La casita de caramelo
es cómoda.
A la casita no llegan ni el pavor
ni la miseria, ni la verdad.
Una musiquita adormecedora
ciñó sus días, y un coro de alcahuetes
siembra cizaña y veneno, día a día.
Una sola gota de sangre
es necesaria
para saber qué destino de sangre,
qué ocultamiento, que terrible verdad
qué atrocidades se esconden
detrás de esa sola gota de sangre,
necesaria.
Ellos se ocultan detrás de enormes
anteojos negros, porque no quieren ver,
aunque de a poco,
la casita de caramelo se derrite.
Se derriten las ventanitas de colores
y la musiquita adormecedora
ahora se transforma en gritos
de reclamo, de piedad. De justicia.
Grandes pájaros negros
custodian las esquinas de la casita de caramelo
pero las plumas ya no aguantan
tanto alquitrán.
Ellos están presos.
Como lo estuvieron sus padres.
Ellos no lo quieren saber. Quizás lo intuyen.
Pero la casita de caramelo es cómoda.
Afuera están los gritos.
Adentro, un silencio ahogado les presiona
el corazón.
Una sola gota de sangre es necesaria.
Y la casita de caramelo
se derrite de a poco,
muy de a poco, hasta que sea la hora.
No falta mucho.
♥ ♥ ♥ ♥
EL CONTESTADOR TELEFÓNICO DE LOS ABUELOS
-Buen día.
-En este momento no estamos en casa pero, por favor, déjenos su mensaje después de oir la señal
Beeeeeeeeeeppp...
- Si es un de nuestros hijos, disque 1
- Si necesita que nos quedemos con los chicos, disque 2
- Si quieren que le prestemos el auto, disque 3
- Si quieren que les lavemos y planchemos la ropa, disque 4
- Si quieren que los chicos duerman aquí en casa, disque 5
- Si quieren que vayamos a buscar los chicos a la escuela, disque 6
- Si quieren que preparemos una comida para el domingo, disque 7
- Si quieren venir a comer aquí, a casa, disque 8
- Si precisan dinero, disque 9
- Si es uno de nuestros amigos, ¡puede hablar!
♥ ♥ ♥ ♥
Juntos, tallamos la palabra como gema.
Cantamos su música.
Creamos mundos y los habitamos.
Narrativa, poesía, teatro, ensayo.
4584-6938